Proyectos didácticos para el aprendizaje de la Lengua y la Literatura
Ruletas educativas
Las ruletas son parte de mi día a día. Estoy siempre con ellas: para la lista de clase, para que salgan los equipos a explicar algo, para los repasos orales, para las correcciones...
Una vez metida ya en el mundo de la ruleta, me decidí a crear las ruletas de análisis inversos y que fueran completamente arbitrarias, pero los conceptos les vayan sonando.


ALTERCUADERNO
Otra forma de aprender
El Altercuaderno nació como un cuaderno de escritura creativa, pero con el tiempo se ha ido transformando en algo mucho más profundo: una forma diferente de trabajar los contenidos de Lengua Castellana y Literatura, desde la creatividad, la reflexión y el aprendizaje consciente.
Es un proyecto que he ido creando, probando y perfeccionando a lo largo de los años en el aula, escuchando al alumnado, observando sus procesos y ajustando las propuestas para que la lengua deje de ser solo teoría y se convierta en experiencia.
Un cuaderno sin normas para crear sin miedo
El Altercuaderno es siempre un cuaderno A5 en blanco, sin rayas ni cuadros.
Nada que marque límites. Nada que condicione.
La ausencia de líneas no es casual: busca eliminar la coacción, romper con la idea de que escribir es “ajustarse a un molde” y permitir que cada alumno y alumna encuentre su propia manera de expresarse.
La consigna es clara desde el primer día:
crear sin barreras, incluso desaprendiendo a veces normas muy interiorizadas desde Primaria, para volver a pensar la lengua desde otro lugar.
Lengua, creatividad y pensamiento
En el Altercuaderno se trabajan los contenidos de Lengua Castellana y Literatura, pero de una forma viva y significativa:
escritura creativa
narración, descripción y diálogo
reflexión lingüística
vocabulario y estilo
gramática y sintaxis integradas en la creación
Por ejemplo, cuando trabajamos el verbo, el cuaderno se convierte en un espacio para crear mandalas verbales, donde conjugación, significado, forma y creatividad se unen en una misma actividad.
Las posibilidades son infinitas: cada contenido puede transformarse en una experiencia creativa que ayuda a comprender, fijar y relacionar conceptos.
Compartir, reír, aprender
El Altercuaderno no es un trabajo silencioso y aislado. Es un proyecto colectivo y emocional:
se comparten creaciones
se leen textos en voz alta
nos reímos
aprendemos unos de otros
dibujamos porque sí
Porque aprender lengua también es disfrutarla, perder el miedo a equivocarse y descubrir que cada forma de expresión es válida.
Mucho más que escribir
En el Altercuaderno no solo se escribe. También se cuida:
la caligrafía, como forma de expresión personal
la disposición del texto en la página
el uso del color, iconos y pictogramas
la organización visual de las ideas
Todo ello contribuye a desarrollar no solo la creatividad, sino también el pensamiento, la metacognición y la capacidad de aprender a aprender. El alumnado toma conciencia de su proceso, de cómo piensa, de cómo aprende y de cómo puede mejorar.
Un proyecto vivo
El Altercuaderno no es un método cerrado ni una receta fija. Es un proyecto vivo, flexible y adaptable a distintos niveles y grupos, que evoluciona con cada clase y cada curso.
Es una invitación a mirar la Lengua Castellana y la Literatura desde otro lugar:
con menos miedo, más libertad y mucho más sentido.


ALTERDIARIO
Lengua, emoción y autoconocimiento






El Alterdiario es la otra cara del Altercuaderno.
Si en una parte creamos desde la imaginación y la palabra, en el Alterdiario escribimos desde la vida: lo que nos pasa, quiénes somos, qué sentimos, qué nos preocupa y hacia dónde queremos ir.
Es un proyecto de escritura personal y reflexiva que integra la Lengua Castellana y Literatura con la educación emocional, el desarrollo de la salud mental y el crecimiento personal del alumnado.
Escribir para entenderse
El Alterdiario parte de una idea sencilla y poderosa:
escribir ayuda a ordenar el pensamiento y a comprender las emociones.
A través de la escritura, el alumnado aprende a:
poner nombre a lo que siente,
reflexionar sobre su propia historia,
expresar miedos, metas e inquietudes,
y construir una mirada más consciente sobre sí mismo y su entorno.
Lengua y educación emocional
En el Alterdiario no solo se trabaja la expresión escrita. Se desarrolla de forma consciente el vocabulario emocional, ampliando la capacidad de identificar, matizar y comunicar sentimientos.
Aprender a distinguir entre tristeza, frustración, rabia, miedo o ilusión no es solo una cuestión emocional: es también una cuestión lingüística. Cuantas más palabras tenemos, mejor pensamos y mejor nos expresamos.
Propuestas que conectan con la vida
El Alterdiario se articula a través de ejercicios guiados, abiertos y respetuosos con cada proceso personal, como por ejemplo:
la línea del tiempo vital, para reflexionar sobre momentos importantes de la propia historia;
la descripción personal a través de emoticonos, como forma de traducir emociones complejas a un lenguaje simbólico;
la autobiografía, adaptada a la edad y al momento vital del alumnado;
ejercicios de proyección de futuro, metas personales y deseos.
Todas las actividades están pensadas para acompañar, no para invadir, y para crear un espacio seguro de expresión.
Un espacio íntimo y respetado
El Alterdiario es un cuaderno personal. No todo se comparte.
Algunas actividades pueden leerse en voz alta si el alumnado lo desea; otras permanecen en el ámbito privado.
Se fomenta el respeto, la escucha y la empatía, creando un clima de aula donde la palabra tiene valor y la emoción también.
Mucho más que Lengua
Aunque el Alterdiario se trabaja desde la asignatura de Lengua Castellana y Literatura, su alcance va mucho más allá:
mejora la competencia comunicativa,
fortalece la autoestima,
desarrolla la conciencia emocional,
y favorece el bienestar personal y grupal.
Es un proyecto que entiende que no se puede aprender bien si no se está bien, y que la lengua es una herramienta fundamental para cuidarse y comprenderse.







